Me han robado dinero de la tarjeta

Me han robado la tarjeta, o la he perdido, que también puede ser causa de mi despite, el caso es que no tengo mi tarjeta de crédito, y esto supone, ante todo una sensación de incomodez muy grande. Lo primero que he hecho ha sido llamar al banco de forma inmediata para anularla, sin esperar a mirar si me la había dejado en casa, es mejor prevenir que lamentar me decían mis padres.

En caso de no llamar de forma inmediata, la entidad no se haría cargo en el supuesto caso de uso indebido de la misma. Pero claro, si me han robado la tarjeta… ¿donde miro yo el número de la oficina para anularla? Afortunadamente un compañero me ha dejado la suya para ver el número y llamar lo antes posible. Suelen aconsejar apuntar el nombre de la persona que te atiende y la hora a la que llamas, así como también recomiendan enviar una carta certificada al banco explicando lo sucedido, aunque yo he de reconocer que no he hecho nada de eso… Compañeros míos me han dicho que si veo algún gasto en mi cuenta que no haya realizado yo, posterior a la denundia de robo, lo reclame a mi banco, para que ellos se hagan cargo del importe robado. Estas directrices se suelen recomendar para el caso de tarjetas de crédito, sobre todo, o débito.


Después de todo el lío, me he puesto a indagar y he querido informarme sobre qué pasaría si te roban el dinero de la cuenta, y me ha sorprendido lo encontrado. Resulta que, en los casos de robo, el cliente es responsable de lo que le sustraigan antes de la denuncia con un límite de 150 €, y el resto corre a cargo de la entidad. Sin embargo, si la entidad considera que el robo se debe a un mal uso, es decir, si sacan el dinero de nuestras cuentas con nuestro PIN porque lo tenemos apuntado en algún lado, la entidad no se hace responsable.

En el caso en el que la tarjeta sea usada para comprar en establecimientos, el usuario reclamará con la denuncia que ha efectuado, y todas las compras posteriores a la fecha de denuncia no serán su responsabilidad, puesto que se puede demostrar que el usuario, en este caso yo mismo, no ha firmado los recibos de esas compras y que además el establecimiento no ha identificado correctamente mediante el DNI al titular de la tarjeta. Con lo que, el establecimiento será el responsable de devolver el dinero al titular de la tarjeta.

Me preocupa sobre todo, que la usen para realizar compras por Internet, porque el fraude es más complejo, no sabemos dónde están las tiendas y la reclamación puede ser más complicada.

También se puede dar el caso de una duplicación de la tarjeta, pero en esto estoy muy tranquilo, habiendo denunciado, muchas tarjetas tienen seguros que cubren casi todos los gastos en caso de robo.

En definitiva, cuando perdemos una tarjeta, crucemos los dedos para que no vuelva a ocurrir, debemos llamar para anualarlas, y si lo hacemos de forma inmediata, seguramente que el peor imprevisto será que nos quedaremos sin tarjeta durante un tiempo, hasta recibir una nueva y que tendremos que volver a realizar el papeleo para solicitar una. Después de este trago, y de comentarlo con mis compañeros, me he dado cuenta que no he sido el primero ni el último en sufrir un problema similar, afortunadamente a mí no me han sustraído ningún dinero, pero ¿y a vosotros? ¿habéis tenido algún problema alguna vez por la pérdida o robo de vuestra tarjeta?